Repartida por las laderas de la cordillera de Tilarán, la zona de Monteverde es quizá la imagen más característica que a uno le viene a la mente cuando piensa en Costa Rica: el verde cubre completamente la zona y los puentes colgantes se cuelan entre las copas de los árboles de las reservas forestales. El mayor centro poblacional de la zona es el pueblo de Santa Elena, donde existen multitud de ofertas turísticas, tanto de alojamiento como de excursiones y circuitos de aventura. De hecho, aquí se encuentra el epicentro de los circuitos por el dosel arbóreo (canopy tours) pues alrededor de Santa Elena se instalaron las primeras tirolinas de Costa Rica.


Día 6:

El trayecto de La Fortuna a Monteverde son aproximadamente tres horas, de las cuales la segunda mitad se hace por una serpenteante carretera de montaña sin asfaltar. Lo mejor es repostar antes de salir de La Fortuna, pues en ese tramo no encontrarás gasolineras. Nosotros llegamos prácticamente a mediodía a nuestro hotel, Monte Fresco Hostel Boutique, que está un poco apartado del núcleo de Santa Elena en una zona llamada Valle Bonito. El hotel llevaba pocos meses abierto cuando nos alojamos, y la verdad es que las habitaciones son muy cómodas y por un precio bastante más económico que el precio medio en Costa Rica, que en la mayoría de casos se corresponde con los estándares europeos. Una habitación con baño privado y desayuno incluido nos costó 21,5€ la noche. Además, el espacio cuenta con cocina y nevera para los huéspedes, así como una zona de sofás con té y café gratis durante todo el día. Desde que llegamos hasta que nos marchamos, Erik nos hizo sentir como en casa (más abajo os cuento porqué) y nos aconsejó en todo momento acerca de qué hacer de la zona.

1. Sabor Tico. Tras descansar un poco del trayecto, fuimos a comer al restaurante más recomendado por los lugareños. Tienen dos locales, uno en el centro comercial de Santa Elena y otro frente a la plaza de deportes. Las raciones son muy (pero que muy) abundantes y tanto los platos como los zumos y batidos están realmente ricos.

2. Don Juan Coffee Tour. El tour comienza con la historia del café en Costa Rica y su impacto socioeconómico, sobre todo en la región de Monteverde. Es realmente interesante conocer las particularidades de este proceso en una zona volcánica. A partir de ahí, el guía va poco a poco narrando los procesos de recolección y elaboración del café a la vez que se visitan las diferentes partes de esta granja orgánica. A continuación se pasa a la zona de producción de cacao, donde también se realiza un recorrido por todas las fases hasta llegar a la degustación del cacao, momento en el que se hace evidente que lo que normalmente llamamos chocolate no es más que azúcar con un poco de cacao.



El tour dura aproximadamente dos horas y es muy completo. Otras opciones para pasar una primera tarde en la zona son la visita al Jardín de orquídeas o algún circuito nocturno como los que ofrecen en el Bosque Eterno de los Niños o en el Santuario Ecológico. Al caer la noche cenamos en Taco Taco, una taquería con buen ambiente y platos muy ricos en Santa Elena.

Día 7:

La mayoría de tours de aventura de la zona incluyen tirolinas, puentes colgantes, rappel y muchas actividades más; lo cierto es que la oferta es muy amplia. En nuestro segundo día en Monteverde decidimos contratar un pack con la empresa Selvatura que incluía canopy tour y puentes colgantes.

1. Selvatura Park. La verdad es que el pack cumplió nuestras expectativas, los guías en la parte de las tirolinas fueron muy amables y todo se sentía muy controlado y seguro. El canopy tour incluye 13 cables, el más largo de todos es de 1 km de longitud. Antes del último cable puedes balancearte sobre el bosque gracias a su Tarzan Swing, aunque esta parte es opcional, igual que la posibilidad de recorrer el último cable colgado en horizontal, a lo Superman. Por otro lado, los puentes colgantes se adentran en el bosque nuboso a lo largo de tres kilómetros de senderos repartidos en ocho puentes de varias longitudes (entre 50 y 170 metros) y que están también a diferentes alturas respecto a las copas de los árboles. Es una opción más relajada en la que puedes ir completamente a tu ritmo. Entre puente y puente se atraviesa el bosque nuboso donde solo se ve verde por todos lados. Como en la mayoría de estos parques tienen un jardín de colibríes y otro de mariposas así como una exhibición de reptiles y anfibios. También tienen una agradable cafetería-restaurante donde comer o tomar un café.


Tras pasar toda la mañana y parte de la tarde en Selvatura Park, volvimos al hotel para descansar y arreglarnos un poco, ya que ese día era mi cumpleaños e íbamos a cenar a un restaurante un poco más especial. Cuál fue mi sorpresa cuando, antes de eso, Erik reunió a todos los huéspedes del hotel para cantarme cumpleaños feliz alrededor de una tarta que él mismo había comprado. Fue un detalle muy bonito y un momento realmente agradable que vivimos junto con otros viajeros españoles e ingleses.

2. El Jardin by Monteverde Lodge & Gardens. El restaurante de este elegante hotel era todo lo que buscábamos para esa noche, un local bonito con un rico menú y una carta de vinos especial.